Las mafias mejicanas

José Martret (#LaIRA, Placeres íntimos o La fragilidad de los verbos transitivos) dirige una adaptación teatral del libro de Lydia Cacho, Memorias de una infamia. Un retrato de la corrupción y la violencia que asolan México.

La tragedia La infamia es la propia biografía de Cacho, una periodista que destapó la mayor red de pederastia de México. En este entramado había nombres de personas muy influyentes y entre ellas dos: Kamel Nacif, uno de los empresarios más poderosos del país, y Mario Marín, gobernador del estado de Puebla. Ambos se unieron para matar a Cacho. Así, contrataron a policías corruptos para que la secuestraran y la asesinaran.

Pero Cacho pudo escapar. A pesar de ello tuvo que luchar contra los ataques y el silencio cómplice del gobierno federal, los ministerios públicos y los jueces. Por ello, decidió contar toda su experiencia en un libro que analiza el modus operandi de la corrupción y las mafias mexicanas.

Nacida en Ciudad de México (México) en 1963, Lydia Cacho es una periodista, escritora y defensora de los derechos humanos. Es autora de doce libros que han sido traducidos a nueve idiomas y están en venta en más de 20 países.

Entre otras distinciones, Cacho ha sido galardonada con el Premio Mundial de la Libertad de Prensa Unesco - Guillermo Cano 2008, el Harold Pinter Prize for International Writer Of Courage (Premio internacional Harold Pinter al Coraje de un escritor) 2010 de Reino Unido y el Premio Internacional de Periodismo Manu Leguineche 2010.

La podemos ver en las madrileñas Naves del Español, hasta el 16 de enero.

 

Las relaciones interpersonales, en versión circo

La prestigiosa compañía Les 7 doigts de la main produce el espectáculo circense donde reflexiona sobre el valor de lo humano y la belleza de las relaciones interpersonales, Passagers. Es una alegoría sobre la vida repleta de poesía, nostalgia y evocaciones estimulantes.

Passagers es el espectáculo circense que la prestigiosa compañía canadiense Les 7 doigts de la main pone ahora en escena, en Madrid. Durante un viaje en tren, una serie de extraños se conoce dentro de uno de los vagones. Inspirados por el movimiento y el trascurso del trayecto, cada uno de ellos cuenta su historia al tiempo que revela el contenido de su equipaje o sus más fantasiosos orígenes. Así, todos transforman su compartimento en un área de juego que propicia la confidencialidad y la cordialidad.

Los números que llevan a cabo combinan danza, expresión física, acrobacias y malabarismos. Acciones secuenciadas por composiciones musicales originales y una puesta en escena totalmente cautivadora.

Les 7 doigts de la main es un colectivo de artistas de circo creado en 2002 en Montreal (Canadá). Gracias a funciones como Traces o Loft ha atesorado una enorme popularidad. Y es que se ha destacado por generar montajes inusuales y únicos en los que se fusiona la danza contemporánea, las acrobacias, el teatro y el circo. Ha realizado más de 8.000 actuaciones en 40 países y en 2016 dio un paso más creando una fundación sin ánimo de lucro con la intención de apoyar la producción y difusión de obras innovadoras, así como el desarrollo artístico mediante residencias, tutorías o talleres.

La podemos ver, en los madrileños Teatros del Canal, hasta el 9 de enero.

Max Aub en estado puro

Maite Pérez Astorga dirige a María Pujalte y Ana Rujas en esta adaptación del famoso monólogo de Max Aub De un tiempo, a esta parte. Es una producción que intercala la crisis existencial del personaje de Aub con la de una chica de nuestro tiempo.

El dramaturgo español Max Aub escribió, en 1939, una reflexión sobre la existencia humana mediante la trágica visión de una mujer judía que vive los días en los que Austria es anexionada por la Alemania nazi. Su título, De un tiempo a esta parte.

El argumento cuenta cómo Emma ha pasado de ser la esposa de un empresario de éxito y la madre de un joven diplomático a una viuda apestada. Su marido fue asesinado por los nazis y su hijo murió en la Barcelona republicana por ser funcionario de un país enemigo. Además, su casa ha sido requisada por los alemanes y ahora sobrevive limpiando las escaleras y los portales de los vecinos que antes la saludaban amistosamente.

Si el opresor entonces era el nazismo, ¿qué produce hoy la angustia y la depresión? Si entonces la libertad de pensamiento era coaccionada a través de un único canal, ¿la saturación de información de dudosa veracidad nos lleva hoy a tener más discernimiento? 

En definitiva, un drama histórico que nos hace reflexionar sobre temas muy actuales…

Maite Pérez Astorga ha sido guionista para series como Amar es para siempre, Hospital Valle Norte o Pelotas. En el teatro, entre otros proyectos, ha dirigido y adaptado junto con David Serrano la versión de la película argentina Dos más dos, junto con Peris Romano ha llevado a cabo Los miércoles no existen y ha sido la directora residente del musical Billy Elliot durante sus dos primeras temporadas.

La podemos ver en el madrileño Teatro Español, hasta el 30 de enero.

Homenaje a Juan Rana

La prestigiosa compañía Ron Lalá presenta el espectáculo cómico Andanzas y entremeses de Juan Rana. El montaje tiene música en directo que homenajea al famoso actor Juan Rana, Al mismo tiempo, reflexiona sobre los límites del humor.

La comedia de tintes clásicos Andanzas y entremeses de Juan Rana presenta cómo la Inquisición ha arrestado a Juan Rana, el comediante más célebre del Siglo de Oro. Su juicio puede cambiar la historia del Arte en España para siempre. Al personaje se le juzga por hacer reír a generaciones enteras de españoles con su humor burlesco e irreverente, donde retrata a toda la sociedad de su tiempo.

Las pruebas que se muestran son una serie de piezas breves donde actúa el propio Juan Rana, una selección de entremeses de los más grandes autores de la época: Calderón de la Barca, Moreto y Quiñones de Benavente, entre otros. En estas escenas se postulan sus crímenes contra la decencia: blasfemia, desacato, irreverencia, provocación, espíritu crítico, herejía…

Juan Rana, alter ego de Cosme Pérez, fue un intérprete muy famoso del siglo XVII. Sus roles más habituales fueron los de alcalde rural y personajes afeminados o de sexualidad incierta, siendo por ello procesado por la Inquisición por sodomía, delito del que fue finalmente absuelto. Su popularidad llegó a tal extremo que realizaron entremeses en su honor e incluso, muchas obras cómicas anunciaban su presencia con el propósito de atraer a los espectadores...

La podemos disfrutar en el madrileño Teatro de la Abadía, hasta el próximo 9 de enero.

Hamlet en versión moderna

La portuguesa Companhia do Chapitô produce una versión libre y moderna de la clásica tragedia de William Shakespeare Hamlet. Una obra que hace una analogía entre el antiguo reino de Dinamarca y una multinacional actual para indagar en temas como la traición, el abuso y los juegos de poder.

La historia de Hamlet (una de las principales tragedias de Shakespeare) mantiene la esencia natural: el rey Hamlet muere a manos de su hermano Claudio, quien toma el control del país y se desposa con su anterior cuñada. El fantasma del monarca se aparece a su hijo, el príncipe Hamlet, relatándole la verdad de su fallecimiento y exigiendo venganza.

Pero todo ello adaptado al mundo de los negocios, ya que los personajes están ataviados con trajes y corbatas, las cuales utilizan para construir fantasiosamente pistolas, ametralladoras, bastones, teléfonos… Además, los lugares de la acción se posicionan dentro de un rascacielos: el sótano, el archivo, la sala de reuniones o el ático son algunas de las zonas que sustituyen a los castillos y las ciudades medievales. De tal modo, la función se desarrolla mediante un hiperrealismo argumental y una amplia comicidad que tiene en la expresión corporal su principal aliado.

La Compañía do Chapitô fue creada en Lisboa (Portugal), en 1996, y siempre emplea el humor como base para cuestionar la realidad social. Conjuntamente, sus piezas se asientan en el teatro físico, el proceso colectivo y la voluntad de imaginación del público. Entre sus producciones destacan otros montajes de teatro clásico, como Electra, Macbeth, Edipo o La tempestad.

La podemos ver en el madrileño Teatro Abadía, hasta el próximo día 19 del mes.

La política y el poder, de la mano

Cándido Pazó (La gallina azul o La compañera de piso) dirige un texto de Ramón Madaula (Perdidos) que se estructura en una cómica batalla dialéctica que profundiza en las bases del poder y la política. Su título: El electo.

La comedia El electo está protagonizada por los actores Antonio Mourelos (Fariña o Los misterios de Laura), y Fernando Coronado, muy conocido por su participación en la serie El secreto de Puente Viejo. El montaje está producido por Contraproducions y Focus.

El protagonista, Coronado, se mete en la piel de un recién elegido presidente del Gobierno. Está a punto de salir a dar su discurso de investidura, pero justo en ese momento le aparece un grotesco tic nervioso que amenaza con arruinar el acto. No puede exponerse ante los medios de comunicación y la opinión pública de esa manera, sería su tumba política.

Alarmado, pide ayuda a un psiquiatra con quien inicia una hilarante charla que les lleva a descubrir sus secretos más íntimos, además de las verdaderas motivaciones de sus trayectorias profesionales y los sucesos que han marcado su vocación. Con ello se crea un enredo que indaga en cuestiones como las ambiciones humanas por el poder, la responsabilidad civil o la moralidad personal y social.

En definitiva, una divertida comedia con temática social.

La podemos ver en el madrileño Teatro Quique San Francisco, hasta el 9 de enero.

El Ballet Nacional de España cumple cuarenta y dosaños

El bailarín Rubén Olmo dirige al Ballet Nacional de España, que acaba de celebrar sus cuarenta y dos años de vida, en un espectáculo especial que abarca casi todos los estilos de danza y homenajea al bailarín y coreógrafo Mario Maya: Invocación.

La primera pieza del nuevo espectáculo del Ballet Nacional de España (Invocación) es Innovación bolera del director de la compañía, Rubén Olmo. Se trata de un repaso por la esencia de la escuela bolera tradicional, surgida en el siglo XVIII, en España, fruto de la combinación de bailes populares andaluces con danzas académicas.

Posteriormente, le toca el turno a Jauleña, un solo inspirado en Granada e interpretado por Rubén Olmo que cuenta con pinceladas de escuela bolera, danza estilizada y flamenco. Eterna Iberia de Antonio Najarro es la siguiente obra que se sube a escena, la cual está basada en Celtiberia de Moreno Buendía.

Por último, la coreografía De lo flamenco cierra la velada. Es un homenaje a Mario Maya, uno de los grandes bailarines de la danza española y fundador en 1994 de la Compañía Andaluza de Danza, el actual Ballet Flamenco de Andalucía.

Rubén Olmo es un bailaor, bailarín y coreógrafo nacido en Sevilla, en 1980. Está titulado en danza española y clásica por el Conservatorio de la capital andaluza. Con una amplia trayectoria, ingresó en el Ballet Nacional de España con 18 años, donde destacó al poco tiempo.

Más tarde formó su propia agrupación con montajes como Belmonte, la danza hecha toreo (2006) y Tranquilo alboroto (2010). Entre 2011 y 2013, fue director del Ballet Flamenco de Andalucía. Además, ha sido distinguido con el Premio Nacional de Danza 2015 en la modalidad de interpretación y el Premio de la Crítica del XXIII Festival de Jerez 2019. En 2019, fue nombrado director del Ballet Nacional de España.

Lo podemos ver, hasta el 22 de diciembre, en el madrileño Teatro de la Zarzuela.