jueves, 24 de octubre de 2013

Teatro-Drama


“Diario de un loco”. Matadero Madrid. Hasta el 17 de noviembre.

“Diario de un loco”, que nació del encuentro amistoso entre José Luis García-Pérez y Luis Luque, cuenta con la colaboración del compositor Luis Miguel Cobo y la escenografía de Mónica Boromello. El relato de Gógol, extraído de Historias de San Petersburgo, habla básicamente de lo que somos y de cómo amamos; de dos de los misterios del alma humana: la identidad y el amor, contados aquí a través de mucho humor.
La historia es por todos conocida: Aksenti Ivanovich, un funcionario de la burocracia rusa zarista, va perdiendo la razón por varios motivos: la rutina de su mísero trabajo, el amor que siente sobre la hija de su jefe y la obsesión de creer que tiene "sangre noble".
Una obra contemporánea imprescindible para una dirección e interpretación impecables.
No cabe duda de que el teatro público sigue siendo un referente en nuestras tablas, y, más, en tiempos de crisis…

Teatro-Drama


“Bienvenido a casa”. Teatro Valle Inclán. Hasta el 27 de octubre.
 
A pesar de lo que su título indica, “Bienvenido a casa” no es una obra de teatro, sino dos en una sola. Con ella, la compañía Pequeño Teatro de Morondanga de Uruguay logra fusionar dos tiempos y espacios, por lo que conviene ver las representaciones en su correcto orden. Así, el objetivo de sus creadores es que el espectador se haga una idea de los acontecimientos que se muestran y, en la siguiente función, cambie totalmente de parecer al situarlo en otro punto de vista.
Por otro lado, se trata de un intento de convertir lo subjetivo en objetivo que realmente esconde un engaño en la percepción y, por consiguiente, una reflexión sobre nuestros juicios morales a primera vista. En la trama, una tragicomedia con mucho humor negro, se reconocen temas universales como la envidia y la miseria; todo ello, a través de la increíble historia del Hombre Elefante , conocida por todos.
Todo un excelente drama, apto para todos los públicos, pero, sobre todo, para los paladares más exigentes.

Danza



“Bodas de sangre”. Teatro Tribueñe. Hasta el 31 de octubre.




El Teatro Tribueñe nos acoge una vez más con estas "Bodas de Sangre". Nada en Tribueñe es convencional; uno de sus rasgos distintivos es la intensidad y la emoción casi litúrgica con las que afrontan cada reto escénico. Con Lorca es difícil, por conocido y representado, escalar cimas. El texto es poderoso; los personajes son arquetipos atávicos; el lenguaje, de eficacia conceptista; los símbolos, de recurrencia siempre nueva; la trascendencia, universal.

Musical



“La llamada”. Teatro Lara. Hasta el 14 de enero de 2014.

“La llamada” es un musical sobre la fe, con una banda de rock en directo y canciones originales. También es una comedia sobre el paso de la adolescencia a la madurez, la amistad, el despertar, el electro-latino, el derecho a cambiar... En esta historia Dios se le aparece a María cada noche, y descubre que a él le encanta Whitney Houston. Ella está representada por Macarena García, Goya a Actriz Revelación 2013 por su papel en Blancanieves, de Pablo Berger. También están actores sólidos y reconocidos como Gracia Olayo, Andrea Ros, Belén Cuesta, Richard Collins-Moore y una banda de rock en directo.
Un musical diferente para una época vacía de espiritualidad, como la que estamos viviendo.

lunes, 21 de octubre de 2013

Crítica de Musical


“Campanadas de boda”. Nuevo Teatro Alcalá. Toda la temporada.  
La nueva producción de la compañía de teatro musical La Cubana nos acaba de llegar a Madrid en forma de comedia sobre el teatro que a veces supone una boda. Con cada vez más frecuencia los casamientos se convierten en auténticos espectáculos. La compañía La Cubana hace una crítica a esta situación haciendo que el público se sienta identificado con los protagonistas de la obra.
El objetivo último de esta compañía es destapar el hecho de que tras cualquier acto cotidiano siempre está el teatro y lo mismo pasa con las bodas. Después de años de tradición, aunque las bodas civiles hayan aumentado no están libres de una puesta en escena digna de la mejor obra de teatro.
Esta comedia vodevil costumbrista no tiene en cuenta el sexo, la raza, la religión o la política al hablar de los contrayentes puesto que se centra en el show que todos ellos montan cuando van a pasar por el altar interpretando incluso un personaje que se desvanece tras haber salido de la iglesia o el juzgado.
Los fans de La Cubana no nos sentimos decepcionados con el resultado de este nuevo show; contiene todos los elementos a los que la compañía nos tiene acostumbrados: humor irónico y, en ocasiones, ácido; buena música; una interpretación impecable y una escenografía de película.
Una vez más, La Cubana se reafirma como una de las grandes compañías españolas de musicales, bebiendo de las fuentes clásicas de la revista y actualizándose con las nuevas formas de hacer en el mundo del espectáculo musical.