"Capitalismo, hazles reír"
Teatro Circo Price, hasta el 29 de septiembre
Esta es una obra del dramaturgo Juan Cavestany llevada a escena por Andrés Lima
El Taller de Investigación Teatral Contemporáneo reúne a más de cien artistas y teóricos para reflexionar sobre la economía y el impacto de ésta en la sociedad. El resultado es esta creación en directo.
Sobre el escenario, un grupo de artistas pertenecientes a distintas disciplinas comienzan a hacerse preguntas sobre el mundo en el que vivimos. A estos interrogantes les acompañan dosis de teatro, circo, baile y acrobacias. El hilo conductor de esta experiencia es el humor con el que se aborda un tema tan complicado como el del capitalismo.
Las preguntas a las que se intenta dar respuesta sobre el escenario son las siguientes: ¿Estamos asistiendo a la muerte del capitalismo? ¿Y cuánto durará esta agonía? ¿Serán años? ¿O siglos? ¿Va a explotar algo? O, por el contrario, ¿ese algo está en su mejor momento? ¿O, quizás, que explote querrá decir que está en su mejor momento?
La idea es buena. Algunas escenas, también, como las de la consulta del terapeuta con el protagonista, ambos en la red del trapecio. La puesta en escena, original y muy arriesgada. Las interpretaciones, buenas e incluso, notables, en el caso de Silvia Marsó, cada vez más guapa y buena actriz. Pero el resultado, fallido porque no nos llega claramente el mensaje, porque se queda en la forma y no trabaja el fondo. El feísmo lo domina todo. Quizás, es lo que el autor y director ha querido mostrar pero pienso que lo podría haber hecho de una forma más atractiva para llegar a todos los públicos. Se ha quedado en una obra para “culturetas”…
Sobre el escenario, un grupo de artistas pertenecientes a distintas disciplinas comienzan a hacerse preguntas sobre el mundo en el que vivimos. A estos interrogantes les acompañan dosis de teatro, circo, baile y acrobacias. El hilo conductor de esta experiencia es el humor con el que se aborda un tema tan complicado como el del capitalismo.
Las preguntas a las que se intenta dar respuesta sobre el escenario son las siguientes: ¿Estamos asistiendo a la muerte del capitalismo? ¿Y cuánto durará esta agonía? ¿Serán años? ¿O siglos? ¿Va a explotar algo? O, por el contrario, ¿ese algo está en su mejor momento? ¿O, quizás, que explote querrá decir que está en su mejor momento?
La idea es buena. Algunas escenas, también, como las de la consulta del terapeuta con el protagonista, ambos en la red del trapecio. La puesta en escena, original y muy arriesgada. Las interpretaciones, buenas e incluso, notables, en el caso de Silvia Marsó, cada vez más guapa y buena actriz. Pero el resultado, fallido porque no nos llega claramente el mensaje, porque se queda en la forma y no trabaja el fondo. El feísmo lo domina todo. Quizás, es lo que el autor y director ha querido mostrar pero pienso que lo podría haber hecho de una forma más atractiva para llegar a todos los públicos. Se ha quedado en una obra para “culturetas”…
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