viernes, 24 de mayo de 2013

Crítica de Teatro-Comedia



“Sexpearemente”. Teatro Alfil. Todos los sábados de mayo y junio.

Sexpeare, una compañía teatral con más de dieciocho años de trayectoria, se ve obligada a actuar en un pequeño escenario de apenas  un metro cuadrado, tamaño que evidencia los actuales recortes económicos y artísticos a los que ha sido reducida la cultura.
Sus dos miembros, los actores Santi y Rulo, se transforman en los personajes Santi y Rulo y representan todo su periplo teatral hasta llegar a esta situación.
Y así, nos llevan desde sus comienzos cabareteros pasando por su etapa en los grandes teatros hasta llegar al “cataclismo actual”  en un viaje que mezcla ficción y realidad, verdades y mentiras, y en la que personajes, autores y actores dialogan sobre teatro, y se preguntan:     " ¿Es la calavera de Lorca la que sostiene el joven Hamlet?".
Todo esto y mucho más, con mucho humor surrealista –el suyo de siempre-, mucha inteligencia interpretativa (que bebe de muchas fuentes) y una puesta en escena lo más imaginativa posible para darle toda la fuerza del mundo a este texto loco pero con mucha cabeza, como todo lo que hace este dúo.
Lo único que no nos ha gustado es que, en la segunda parte del espectáculo, el texto habla demasiado de la profesión de actor, de lo pobrecitos que son los actores y de lo malos que son los políticos con su estrategia de recortes a la cultura. Es un tópico al que ya estamos demasiado acostumbrados a ver en el teatro y en el cabaret. A pesar de estar totalmente de acuerdo con esta crítica, no nunca es bueno caer en el victimismo…

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